viernes, 21 de diciembre de 2007

VOLVER






Volver cuesta más que irse, quizás nunca había pensado que volver a una ciudad de provincias de donde se había marchado siendo niña fuera tan duro, pero era necesario para curarse de si misma, de esa profunda desilusión que le hacia odiar todo lo que necesitaba y hasta ahora sólo era una burla, su vida había sido una farsa triste y grotesca.
Nadie la conocía, no tenía familia en la ciudad, así que su anonimato le servía de relax para vagabundear y descansar de las vueltas y líos de su cabeza.
No iba a tener problemas de dinero, él se había portado bien, no le convenía para nada un escándalo y recibiría todos los meses en su cuenta más que suficiente para no necesitar trabajar, pero algo tendría que hacer...buscar una casa, no le gustaría seguir en el hotel por mucho tiempo; un trabajo que le ayudará a pensar en otra cosa; unos nuevos amigos, en suma una nueva vida que no se la iba a proporcionar el dinero de él.


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2 comentarios:

Simplemente Olimpia. dijo...

Y la dureza del regreso radica en...?
tener que responderse?
tener que sustentarse con su propio esqueleto de dudas?

Ufff, hoy estoy nociva de preguntas. Discúlpame.

Olimpia.

Juansintierra dijo...

La dureza del regreso es el fracaso. Fracasar, aunque sea capaz de volverse a levantar, seguramente lo hará, no deja de ser una amargura para alguien tan ambiciosa y con tanta fuerza como ella. Del desamor no ha salido bien parada, ella seguramente sigue amando a quien tanto le ha engañado.


J.